Maestros

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lunes, 30 de abril de 2012

Listado de temas: Enero/Abril 2012



ENERO

278. Divito y aquellas “¡Chicas!”
279. Un enero complejo (Gustavo Sala y su tira en Página/12)
280. 1 tema, 5 autores


FEBRERO

281. Primeras novedades del 2012
282. Mundo Quinterno y la ley de la calle
283. Chicas de historieta: La señorita Pilar
284. Siglo XIX: El reino de la caricatura
285. Enrique Stein y el periódico El Mosquito
286. Estrellas fugaces (Bartolo y Prudencio)
287. Y en este rincón… (por Maitena)


MARZO

288. La vuelta del “Mundo Schneider”
289. Nuestro humor gráfico en el Salón del Libro de París
290. La “cocina” de Inodoro Pereyra (IV, nunca es tarde)
291. Claves del humor: Landrú (I)
292. Claves del humor: Landrú (II)
293. Festejan en Chile los 50 años de Mafalda
294. Crist recuerda al Libro de Oro
295. Primera reunión 2012 de coleccionistas
296. …Y finalmente Mafalda no cumple 50 años
297. ¿Las historietas humorísticas más extensas?
298. Hemeroteca virtual (“Conventillo” en el blog de Fabio Cernuda)
299. ¿Un nuevo Museo del Humor?
300. Humoristas en París
301. De padre a hijo, y viceversa (Caloi y Tute)
302. 4 caricaturistas homenajean a Messi
303. Invitación (participación del autor de este blog en una muestra plástica colectiva del IUNA)
304. Homenaje a Pepe Angonoa
305. Reportaje a Kioskerman en el diario Los Andes (Mendoza)


ABRIL

306. Cuadro a cuadro (“El Gran Duque de la Mancha”, gran trabajo de Quinterno)
307. A propósito de un mail de Osvaldo Laino
308. “Mafalda, siempre Mafalda” (suplemento homenaje del diario Clarín)
309. Sendra, Ciudadano Ejemplar de Mar del Plata
310. Nunca es triste la verdad… (Humor Registrado: honestidad periodística e intelectual durante el conflicto de Malvinas en 1982)
311. Luis J. Medrano y sus “Grafodramas”
312. Aquella Buenos Aires de Calé
313. Medrano y Calé, por Jorge B. Rivera
314. ¿Quién anda ahí?: ¡Quino! (último libro del gran Joaquín Lavado)
315. Listado de temas Enero/Abril 2012



domingo, 29 de abril de 2012

¿Quién anda ahí?: ¡Quino!

Siempre es para celebrar la llegada de un nuevo libro de Quino, más aún teniendo en cuenta que el último de estas características se presentó hace ya cinco años.
En este caso, el dibujante vuelve sobre muchos de sus temas habituales: las desigualdades sociales, la hipocresía de las distintas formas del poder, las creencias, el futuro, la vejez, la muerte, la actualidad, el matrimonio, la salud, nuestro propio país y varios detalles más que los lectores podremos ir descubriendo.
Y como es habitual, con esa dósis de ironía y pesimismo ante la conducta del ser humano que es, sin embargo, la herramienta que esgrime para transmitirnos su profundo amor por la existencia y su convicción de que el mundo - si el hombre aprendiera a prescindir de su egoísmo - podría llegar a ser un mejor lugar para vivir.

Tres fragmentos para ir palpitando los intensos momentos de esta obra.

Por otro lado, aprovecho la oportunidad para ofrecer un listado de su obra (que no pretende ser completa) para quienes deseen adquirir nuevos libros o simplemente quieran tener una idea de los que ha publicado (1):

MAFALDA

Mafalda 1 al 10
Mafalda inédita
10 años con Mafalda
El mundo de Mafalda
Toda Mafalda
A dónde vamos a parar?
Y digo yo... (2 versiones)
Al fin solos
¡Así es la cosa, Mafalda!
Mafalda (Biblioteca Clarín)
Declaración de los Derechos del Niño (Unicef)
Mafalda & Friends 1 al 10

TEMÁTICA DIVERSA

Bien, gracias, y Ud.?
Mundo Quino
Yo que Usted...
A mí no me grite
A la buena mesa
Quinoterapia
Sí, cariño
¡Yo no fui!
¡Qué mala es la gente!
Esto no es todo
Hombres de bolsillo
Quino 50 años
¡Qué presente impresentable!
La aventura de comer
Gente en su sitio
Ni arte ni parte
Déjenme inventar
Potentes, prepotentes e impotentes
Humano se nace
¡Cúanta bondad!
¿Quién anda ahí?

A los mismos (en uno y otro caso) podemos agregar una infinidad de ediciones en otros idiomas, agendas, libros con la participación de diversos dibujantes, catálogos, etc.


(1) No se encuentran en orden cronológico.

jueves, 26 de abril de 2012

Medrano y Calé, por Jorge B. Rivera



Jorge Bernardo Rivera (1935-2004)


Para complementar las dos entradas anteriores subo ahora este fragmento del extenso artículo sobre la historia del humor gráfico argentino realizada por Jorge B. Rivera para la revista Crísis en 1976 (1). Se trata de uno de los escasos y más completos trabajos en los que se ha analizado y comparado a ambos dibujantes:

La óptica humorística de "Rico Tipo" y "La Nación"

"Si no fuese notoriamente injusto con talentosos creadores como Oski, Torino, Ferro, Battaglia, etc., que definen las múltiples vertientes estilísticas y temáticas de la época, afirmaría que bastan los nombres de Alejandro del Prado (Calé) y Luis J. Medrano para marcar una de las etapas más brillantes del humorismo gráfico argentino.


Fanático del fútbol de oro de la 'maquinita' riverplatense y del tango ejecutado por el Salgán de los 50, Calé se inició en Descamisada y Avivato, para recalar definitivamente en Rico Tipo, en cuyas páginas se afincó su inigualada Buenos Aires en camiseta, especie de brillante coronamiento de la veta costumbrista de nuestro humor dibujado. Medrano, por su parte, inició sus Grafodramas en las páginas del diario La Nación, en las que se cobijarían - desde los comienzos del 40 - durante más de dos décadas. Humorista fecundo, se hará conocer también por sus dibujos en la revista Argentina (1949), por la experiencia trunca de Potpourrí, una revista de curioso formato, y por secciones periodísticas fijas como Diagonal y Florida (Vea y Lea), Temas (Atlántida) y Vea, vea, vea (Goles), etc.


Medrano en la redacción de Popurrí, junto a algunos colaboradores de la revista

Tanto Calé como Medrano - desde medios y perspectivas diferenciadas - esbozan en su obra una suerte de pequeña sociología dibujada de la vida porteña, de catálogo de los tics, las fantasías, las debilidades y las pesadillas de esos seres que se apiñan y se ofuscan en la gran ciudad. Con puntos de contacto y divergencias en muchos casos fundamentales.

Si en la obra de Calé la instancia de lo político aparece como desleída, en la de Medrano será recurrente y en gran medida indispensable para la plena percepción de los significados. El mundo de Calé es el mundo barrial del proletariado naciente y de la pequeña clase media favorecida por la expansión de los años 40; muy pocas veces el universo segregado de los marginales o de los integrantes del hampa. El mundo de Medrano, por el contrario, será el de la gran burguesía, o el de la clase media estamentada y con 'tradiciones' inconmovibles, heredera directa de la próspera clase media alvearista. Un mundo de oligarcas, industriales, financistas, profesionales, empleados públicos, ejecutivos, comerciantes y rentistas, en el que se filtran, ocasionalmente, los personajes de la picaresca tribunalicia y turfística, los bohemios y una turbia fauna de empobrecidos, fronterizos y desplazados.

Calé (der.), junto al periodista deportivo Juvenal y al futbolista Néstor 'Pipo' Rossi

El mundo de Calé, preferentemente, será el de la pequeña comidilla casera, la rencilla vecinal, el incidente nimio y cotidiano, que tiene por escenario las veredas de Villa Lugano y Mataderos; o el mundo de la diversión de fin de semana (el baile, la 'completa' en el cine de barrio, el picnic, el partido de fútbol); o el de los sucesos periodísticos (casamientos, velorios, bautismos, carnavales, etc.). El de Medrano - quien no desdeña, por cierto, la anotación de los grandes temas populares, ni la crónica menuda de los sucesos cotidianos - enriquecerá el espectro recortado por Calé con las fluctuaciones y los azares del mundo de los negocios, los problemas del arte, las convenciones de la etiqueta social, el savoirfaire, las altas especulaciones políticas y empresarias, etc.


El mundo de Calé es un mundo "en camiseta", de entrecasa, y a la vez un mundo endomingado, 'a lo glostora', poblado por las extravagancias peluqueriles y sartoriles de los años 40, en tanto que Medrano es un discreto y atildado universo de caballeros y de señoras que se visten 'de Corrientes al norte', periódicamente inficcionado por las 'hilachas' de los que 'no pudieron triunfar en la vida'.


En famila (I): Medrano

Calé tenderá a desarrollos más 'barrocos', apoyados o reforzados por textos abundantes, escenas de conjunto, abigarramientos, montajes espaciales y temporales, confontaciones, diálogos, globos abiertos y toda la utilería del género. Medrano resolverá sus Grafodramas en un único cuadro apaisado, con una imagen generalmente límpida y la exclusiva apoyatura que suministran una palabra o una frase sintética.


En Calé quedará todo tramitado y explicado, inclusive redundantemente explicado. El ascetismo y la economía de recursos de Medrano, por el contrario, hará que algunos de sus Grafodramas resulten un tanto herméticos, requieran el auxilio de un saber especializado (de carácter social, cultural o profesional), o tengan un significado a primera vista más 'abierto' que los muy explícitos significados de Buenos Aires en camiseta.


En famila (II): Calé


Tanto en Calé como en Medrano la observación de la vida urbana terminará por sedimentar una suerte de ironía escéptica y en algunos casos no demasiado esperanzada. Pero mientras que para Calé las incomodidades y las pequeñas pesadillas de la vida obedecen - en el encuadre de una típica 'filosofía' de mesa de café - a la fatalidad o al 'demonio' de las cosas, para Medrano parecen responder, en una tentativa de análisis más 'reflexivo' y 'político', a la existencia de comportamientos sociales negativos: la burocracia, la indisciplina, la improvisación, la falta de jerarquías sólidas, etc.


Uno y otro serán buenos observadores de su contorno y demostrarán en su obra un agudo poder de captación de los detalles esenciales, del espíritu de las cosas, del elán de las situaciones y los tipos humanos. Para Calé la clave será decir todo; para Medrano, sugerir todo. Calé propondrá con sus dibujos una crónica de lo social. Medrano, una reflexión sobre lo social. Calé: el fútbol desde el tablón. Medrano: sin desconocer el tablón, el fútbol desde la platea. La distancia que va de La Nación a Rico Tipo."

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Para finalizar, y como todos saben, en este momento se desarrolla la 38a. Feria Internacional del Libro de Buenos Aires. En el stand de Ediciones De la Flor es probable que aún puedan hallarse ejemplares de "Buenos Aires en camiseta", editado en 1994. Y tal vez en el de La Nación (o en otros) se encuentren algunos "Grafovida", sobre la obra de Medrano en general.
Más económico y sencillo el primero, lujoso y bastante más costoso el segundo; son dos obras que vale la pena adquirir, ya que lo verdaderamente valioso está en cada una de sus páginas.


(1) El artículo completo se publicó en este blog los días 4 y 5 de octubre de 2010


Primera y cuarta foto, pertenecientes a "La Argentina que ríe" (A. Cascioli - Oche Califa, Fondo Nacional de las Artes, 2008)
Segunda foto: tomada de riverlujoypueblo.blogspot.com
Tercera foto: perteneciente a "Grafovida" (A. Cascioli - Oche Califa - Elisa Medrano, La Nación, 2004)

Fotografía de Jorge B. Rivera: Wikipedia.

miércoles, 25 de abril de 2012

Aquella Buenos Aires de Calé


“Cuando en 1963 murió Calé (Alejandro del Prado era su verdadero nombre) yo tenía 11 años y mi hermano Alejandro, el músico, acababa de cumplir los 8. Podría decir que desde entonces la relectura de sus trabajos al correr de los años estuvo signada, para nosotros, por un orgullo parecido al que seguramente sentirá el hijo de un ingeniero al ver el puente construído con la participación de su padre algunas décadas atrás, o el de un ciclista al ver a su padre en una tapa de “El Gráfico” en los años de Panzeri.”

“(…) La maestra de primer grado en la escuela de Cortina y Simbrón, en Villa Real, pregunta de qué trabaja el padre de cada niño, respondo a mi turno ‘de dibujante’. ‘Ah, qué bien’ - palmea en la cabeza, comprensiva, la maestra – ‘¿pero de qué trabaja?’”

“(…) Cuando Calé dibujaba, en la estrecha pieza atiborrada de papeles y recortes archivados para tomar modelos (pieza que además ocupaban las camas que compartíamos con mi hermano, y que tenía una ventana con vista al zanjón cíclicamente inundado, como la calle de tierra)…”

“(…) Mi hermano y yo le ayudábamos a echar agua caliente en el pico del estrecho frasquito vacío de tinta china, para disolver la capa reseca del lado interno: no había en casa medio sope para comprar un frasco nuevo.”

Con esta calidez, se refería Horacio del Prado a su padre, el gran Calé, en el catálogo “100 años de humor e historieta argentinos”- Municipalidad de Córdoba, 1986;  un hombre que supo retratar su época como pocos desde las páginas de la Rico Tipo de Guillermo Divito.
 
   
     Si bien los dibujos presentados luego del texto de esta entrada fueron publicados originalmente en Rico Tipo durante los años 50, los mismos se escanearon de los libros 1 y 2 denominados "Selecciones de Calé - Buenos Aires en camiseta", que aparecieron a mediados de la década del 60 y cuyas tapas llevaron las ilustraciones que aquí vemos. 


Y para saber más de él, leamos a Silvina Walger (1):

“Empleados, comisionistas, quinieleros, especuladores, empresarios, burócratas de clase media, artesanos, reos, mujeres de vida irregular – adjetivo al que para hacerse acreedora bastaba simplemente con apretarse el trasero – y siempre las más atractivas. Chicas buenas y románticas, suegras, cuñadas, vecinas curiosas y patéticos hermanitos con los pantalones largos recién puestos obligados a hacer de chaperones compartían pasiones como el fútbol, el tango, la timba y hasta el radioteatro de la tarde. Calé pintó (o sea dibujó y comprendió) a todo ese conglomerado humano…”

“(…) Calé había nacido en Rosario y fue criado por una madre pintora y cinco tías solteronas. En 1945, cuando tenía 20 años, se trasladó a Buenos Aires y gastó todos sus ahorros escuchando a sus dos máximos ídolos, Horacio Salgán y Astor Piazzolla.”

(Ha relatado María Esther, su viuda) “Calé era igualito a sus personajes (…) todas las personas de la ciudad eran sus amigos, por eso  podía comprenderlas tan bien.”

Este inigualable creador, que forma parte de esa serie de maravillosos dibujantes humorísticos  que se han dedicado al costumbrismo - en este caso referido al mundo porteño - murió a los 38 años. Dice Silvina Walger:

“Sin embargo fue su dedicación al trabajo, que no le ahorró cigarrillos, café ni actemines, lo que acabó con él a una edad en la que todavía se podía esperar mucho más de su tierna y sociológica mirada.”


  
  



(1) Fragmentos del texto correspondiente al libro Calé: Buenos Aires en camiseta 1 (Ediciones de la Flor, 1994). 

jueves, 19 de abril de 2012

Luis J. Medrano y sus "Grafodramas"

El 1 de diciembre de 1941 apareció en el diario La Nación el primer “Grafodrama”. A partir de allí, su autor Luis J. Medrano (1915-1974) comenzaba a destacarse como un gran observador de la vida cotidiana , exhibiendo un poder de síntesis admirable: Una palabra (al pie de cada dibujo) como elemento referencial, para que nuestra inteligencia - al relacionar ambos - produzca el necesario “click” que lleva a la comprensión e inmediatamente a la sonrisa.

Medrano (quien continuó ininterrumpidamente con esta creación en el diario hasta su fallecimiento), en ocasión de una entrevista, expresó:
“Algunos temas no son precisamente risueños, pero el dibujo hace aparecerlos como tales” (el mío es) “un humorismo para pensar, en el que el trabajo del dibujante es completado, por así decirlo, por el ingenio del lector”.
“No sé
(qué es un grafodrama). Realmente no sé definirlo. Me propuse al comienzo hacer una historieta cómica. Pero de pronto me dí cuenta de que podía ser un humorista”.
“El humorismo tiene un matiz completamente distinto: más hondura, tiende a lo satírico, es más literario. Yo trato de escribir gráficamente”
(1).

Fundador de la revista "Popurrí", ilustrador de los almanaques de la firma Alpargatas, creador de otras tiras como "Estaba escrito" , y de personajes como "Matías, talento de la era atómica" y el ”Contreras”; Medrano fue admirado por Quino, Alejandro Sirio, Mujica Láinez, Sábato y toda la gente de su tiempo. Y también por la de las generaciones posteriores, conforme fueron descubriendo su singular talento.

Los siguientes ejemplos pertenecen a la "Primera compilación de Grafodramas aparecidos en La Nación", (Buenos Aires, 1943). Aunque sean verdaderos documentos de una Buenos Aires o una Argentina que ya no es, podemos constatar que algunos aspectos se parecen bastante a los actuales...



(1): Del libro Grafovida (Edición y arte: Andrés Cascioli; edición y textos: Oche Califa; selección y corrección del material: Elisa Medrano). La Nación, 2004.

Otros datos: La Argentina que ríe (Andrés Cascioli - Oche Califa), Fondo Nacional de las Artes, 2008.

domingo, 15 de abril de 2012

Nunca es triste la verdad...

Se sabe, Malvinas fue, es y será siempre un tema de gran sensibilidad (y que merece un respeto incondicional y una consideración permanente por todos los que participaron de la dolorosa contienda, en especial para quienes entonces no tenían más que entre 18 y 21 años). Así se pudo comprobar cuando se iniciaba este mes de abril. Y como ocurre habitualmente, las opiniones y aspectos que de este tema surgen fueron muy variados.
Una de esas miradas se refirió al desempeño de los medios durante aquel período que comprendió desde fines de marzo hasta mediados del mes de junio de 1982: errónea y fatal confianza en la imparcialidad de ciertos gobiernos extranjeros, datos inexactos, noticias que no se ajustaban a la realidad, engaños y demás...
Pero hubo excepciones. Entre ellas, ese lugar vital que representaba Humor Registrado. Como ejemplo muy pero muy acotado (habría que dedicarle amplio espacio a una multitud de notas e ilustraciones), estas son algunas de las portadas (realizadas por Andrés Cascioli) que presentó dentro de la etapa mencionada, muestra de que si bien tomaba la recuperación de las islas como una causa justa, nunca perdió de vista la verdad de la época.
Y todavía quedaba por delante casi un año y medio para que Ceo realizara uno de las tapas más emblemáticas de la publicación, símbolo cabal del retorno de la democracia, por la que esta gran revista tanto había luchado.

Números 77 (marzo) y 80 (abril)

Números 81 y 82 (mayo)

Números 83 y 84 (junio)

martes, 10 de abril de 2012

Sendra, Ciudadano Ejemplar de Mar del Plata


En el sitio http://www.codigomardelplata.com/ se informa acerca de esta muy merecida distinción a Fernando Sendra, nacido en la ciudad mencionada. El siguiente es el texto completo (no se consigna el autor del mismo), que incluye un resúmen de la biografía del dibujante:


DECLARAN CIUDADANO EJEMPLAR A FERNANDO SENDRA


El Honorable Concejo Deliberante aprobó por unanimidad un Proyecto del Concejal Mario Rodríguez, de la Unión Cívica Radical, por el cual se otorga la distinción "Ciudadano Ejemplar" al Señor Fernando Sendra, en reconocimiento a su destacado desempeño en el campo de las artes, la educación y la cultura en general.

Se ha tomado en cuenta para esta distinción, la destacada y amplia trayectoria desarrollada por el humorista gráfico e historietista argentino Fernando Javier Sendra, nacido en Mar del Plata el 8 de septiembre de 1949, y padre de 4 hijos: Alejo, Javier, Rocío y Guadalupe. Según sus propios dichos, de la relación con ellos saca las ideas para sus creaciones.

Fernando Sendra estudió la carrera de Bellas Artes. Fue alumno de las escuelas de Bellas Artes, Manuel Belgrano y Prilidiano Pueyrredón, y en el departamento creativo del CICMAT, un organismo vinculado con el Instituto Di Tella.
Se inició profesionalmente en 1973 publicando viñetas de humor en la revista Siete Dias, y más tarde en Para Ti, Jocker y La Semana.
Se estableció en Europa durante un tiempo y volvió al país en 1978. Allí comenzó a publicar en Clarín y dibujar para Editorial Perfil. En 1983 comenzó a colaborar en Libre, Semanario y Don. Ese mismo año publicó una tira enTiempo Argentino. En 1984 empezó a publicar una tira en La Razón, además de viñetas diarias. En 1985, nació la tira Prudencio, que se publicó desde 1990 en la contraportada de Clarín, y que en 1993 derivó en Yo, Matías. Trabajó también en Página 12. En 1988, comenzó a publicar en la sección de los avisos clasificados de Clarín.
Ha publicado más de treinta libros, entre otros la novela "La Calle de las Cuatro Enaguas". En 2009 participa con un original de su personaje Matías, realizado para el diario Clarín, en la muestra "Bicentenario: 200 años de Humor Gráfico" que el Museo del Dibujo y la Ilustración realiza en el Museo Eduardo Sívori de Buenos Aires, homenajeando a los más importantes creadores del Humor Gráfico en Argentina a través de su historia. Asimismo ha publicado en más de 60 diarios del interior y del exterior como en Venezuela, Chile, México, España, E.E.U.U., Ecuador, Bolivia, Uruguay, Paraguay, Costa Rica, y colaborado para la Organización Panamericana de la Salud en programas de prevención.
Participó activamente con charlas y artículos en el Foro Económico de Davos 2002, en la Eco 92, en la Feria del Libro de Bogotá 1994, y en las de la Argentina, y fué jurado de premios varios y concursos de manchas; y este año lo será del premio Konex.

Ha sido destacado con premios como TEA, Prossa, ALija , Educarte, Fundación Sin Anestesia, Konex 1992, Konex 2002, Lobo de Mar 2011, Organización Panamericana de la Salud, y distinguido por las revistas "Acción" y "Gente".

Fernando Sendra visitará la ciudad de Mar del Plata en este mes de Abril, y durante su estadía le será entregada esta distinción en un Acto a llevarse a cabo en el recinto del HCD.

Fotografía: new.paho.org

domingo, 8 de abril de 2012

"Mafalda, siempre Mafalda"


Con este título, la edición dominical del diario Clarín presenta un suplemento de 8 páginas dedicada a la niña que alguna vez supo decir que...

"Si uno no se apura a cambiar el mundo, después es el mundo el que lo cambia a uno".

Podemos disfrutar entonces de algunas tiras de Mafalda y de dibujos-homenaje a cargo de Horacio Cardo, Crist, Lucas Varela y Horacio Altuna. También de un resúmen de las características de cada personaje y de conocer datos estadísticos que a esta altura ya no sorprenden, como que cada uno de los tomos de la colección ha vendido un millón de ejemplares...

En los siguientes links pueden leerse (además de la inicial donde no se he registrado su autor) las notas a cargo de Sergio Moreno, Patricia Suárez, Daniel Divinsky, Daniel Samper y Fernando Savater, respectivamente.

http://www.clarin.com/sociedad/Quino-creador-nina-rebelde-entranable_0_677332486.html

http://www.clarin.com/sociedad/Amiguera-politizada-enemiga-mortal-sopa_0_677332487.html

http://www.clarin.com/sociedad/Mundo-Mafalda_0_677932350.html

http://www.clarin.com/sociedad/cosas_0_677932359.html

http://www.clarin.com/sociedad/Felicidades-clasico-repara-tiempo_0_677932370.html

http://www.clarin.com/sociedad/eterna-disconforme_0_677932389.html

Y como bien dice Patricia Suárez, es comprensible que luego de diez años Quino decidiera finalizar la tira (el autor no quería repetirse), negándose a que un equipo de guionistas generara nuevas ideas para continuarla, como ha ocurrido en otros casos. Decisión loable, aunque se la extrañe.
Por suerte, retomar los libros cada tanto - y olvidos lógicos de la memoria mediante - , nos da la posibilidad de redescubrir cada momento, mientras secretamente deseamos una reaparición que, aparentemente, no se producirá.

sábado, 7 de abril de 2012

A propósito de un mail de Osvaldo Laino


Hace un par de días llegó a mi casilla (como a la de mucha otra gente) un mensaje del maestro Osvaldo Laino donde me daba la noticia de su muy próxima partida a los Estados Unidos. Además de desearle un feliz viaje, quisiera agregar aquí que en estos últimos meses (fines del 2011 a la fecha) tuve la oportunidad de intercambiar varios mails con Osvaldo sobre temas del humor gráfico y en todos ellos disfruté de su cordialidad y de su trato respetuoso. También de su humildad, teniendo en cuenta su extensa y muy destacada trayectoria, algo no muy común de encontrar en nuestro diario vivir, dejando claro que en ese aspecto también es un maestro del que todos podemos aprender (incluído el que suscribe).
Ocurre que con este ejemplo quiero transmitir que más allá de que lectores, investigadores, estudiantes, fans, coleccionistas o dibujantes (o autores de blogs que reúnen varias de estas cualidades) me han enviado material y reflexiones sobre la historieta humorística o yo en la medida de mis posibilidades se los he brindado a ellos, queda lo más agradable de todo: la comunicación con el otro, sentir que se recibe y se dan cosas buenas.
El ejemplo de Osvaldo me llevó a escribir este post, sensaciones que vengo percibiendo y que en sencillas palabras quería expresar. Porque aunque siempre sea una alegría conseguir esa vieja revista que creíamos inhallable, las vivencias mencionadas se valoran mucho más.

martes, 3 de abril de 2012

Cuadro a cuadro

Hace casi un año un año y medio comentaba el valor o atractivo de los dibujos en sí mismos, independientemente de lo que se esté contando. Vuelvo ahora sobre este tema, con un ejemplo más concreto y completo (quizás el primero de varios).

Una de las creaciones de Dante Quinterno más elogiadas es sin dudas “El Gran Duque de la Mancha”. En su versión de “Andanzas”, corresponde al número 18, de junio de 1958, y consta de 183 episodios (o tiras).
Su aparición original fue en el diario El Mundo, el 25 de diciembre de 1938, y habría finalizado (no tengo datos absolutamente fehacientes) el 13 de julio de 1939. El 14 de agosto de este último año se empezó a republicar en la Patoruzú semanal (número 100) y se mantuvo hasta el 117 (11 de diciembre del 39). Como puede deducirse, no se reeditó allí en forma completa, aunque de alguna manera puede aceptarse que se llegó al final de la primera parte de la historia.

Tal momento es al que vamos a referirnos, presentando una síntesis de su argumento:
El cacique conoce a un noble (el mencionado “Duque”), extrañamente convertido en vagabundo. Aunque Patoruzú desea ayudarlo, el orgullo de aquél se lo impide. Finalmente el indio descubre la verdad: Engañado por un primo, el noble se vió obligado a abandonar su castillo y a renunciar a sus bienes ante las amenazas de su pariente. El estafador, a su vez, utiliza un sosías del Duque para manejar los dominios de éste.
Patoruzú, su nuevo amigo y el padrino viajan entonces al lugar del hecho (Montenegro) a poner las cosas en su lugar. Lo logran, aunque luego de una multitud de divertidas confusiones, enredos, peligros y peleas. A pesar de ello, el malvado primo (previamente a su captura) había contado con el tiempo necesario para hacer creer a los colonos que el Duque no cumpliría con su promesa de regalarles las tierras al cumplirse 30 años de su labor en las mismas (a no preocuparse, no hablaremos aquí de cuestiones feudales). Como consecuencia, los campesinos capturan al Duque para someterlo a la horca.
El indio, consciente de que su amigo está al borde de la muerte, intenta con la mayor rapidez posible llegar al lugar del hecho. Lo hace acompañado del doble (quien confesará la verdad) y del padrino.

Y es en este punto donde pasamos a las imágenes, al desenlace de la primera parte de la historia.

Dice Susana Muzio:

“Quinterno hace allí – cuadro tras cuadro – un alarde de preciosismo gráfico que se resuelve en perspectivas, claroscuros y dibujos casi burilados que enriquecen la trama de su historieta” (1)

Veremos entonces ese fragmento final - tal como comenta Muzio - cuadro a cuadro, para apreciar detalladamente cada dibujo: las expresiones, los puntos de vista, la escenografía, los contraluces, el dinamismo de las acciones, la técnica en general… (desde ya, hacer click y verlo ampliado).
Después, la historia seguirá, pero ahora disfrutemos – otra vez al decir de Muzio – de este verdadero “Capo lavoro”.



(1) Muzio, Susana: Releyendo Patoruzú (Espasa Humor Gráfico, 1993)

Imágenes correspondientes a la revista Patoruzú semanal (números 115 y 116, 1939)